Carbonadas de presa ibérica


17 ago 2014


21:34 TdD o lo que es lo mismo 21:34 de la tarde de domingo después del puente. Ya se ha acabado casi el puente, que poquito ha durado. Mañana otra vez a la oficina...pero bueno ya me queda menos para las vacaciones.

Aprovechando que he estado por la provincia de Huelva recientemente, se  me ha antojado hacer un poquito de presa ibérica guisada. Para los que no la conozcáis, la presa es una parte del cabecero del lomo del cerdo. Es una carne muy jugosa, ya que tiene bastante grasa entre la carne. Si la compráis ibérica, esta grasa no es mala para la salud (siempre tomada con moderación, claro).


                    - 4 filetes de presa ibérica (2 uds/persona)

                    - 3 zanahorias grandes

                    - 3 cebollas medianas

                    - 2 patatas medianas

- 1 lata de cerveza

- 250 ml de caldo de carne y/o  verduras

- Sal y pimienta negra molida

- Mantequilla



Empezamos por pelar y cortar en juliana fina todas las cebollas. Calentamos la cazuela y añadimos un trozo de mantequilla. A continuación, echamos la cebolla sin dejar que la mantequilla se queme, añadimos un poco de sal y la pochamos a fuego bajo para que se haga despacio.

Dependiendo del tamaño de filetes de presa que tengamos, los cortaremos por la mitad o no (yo en mi caso los tuve que cortar). Los salpimentamos y pasamos por harina, para freírlos en la sartén con aceite. Es importante que solo los doremos por fuera, no que los hagamos. Una vez fritos los reservamos en una fuente con un poco de papel absorbente para que suelten aceite.


Una vez tengamos pochada la cebolla, añadimos los filetes y vertemos la lata de cerveza y el caldo de carne y/o verduras. Debemos conseguir que quede todo tapado de caldo para que no se nos seque. Dejaremos cocer todo durante 1 hora aproximadamente  a fuego bajo hasta ver que la carne está tierna. Una vez que haya arrancado a hervir, después de echar caldo y cerveza, debemos dejar la tapa media abierta, para conseguir que la salsa evapore y reduzca, quedando una textura final más espesa.

Para acompañar este plato se puede recurrir a multitud de guarniciones como la verdura cocida, arroz blanco e incluso pasta. En este caso hemos elegido la verdura, para lo cual hemos cocido unas zanahorias en rodajas y unas patatas. Las zanahorias las hemos incorporado al guiso en el último momento, mientras que las patatas se han puesto directamente en el plato. 

Os dejo a vuestra elección las guarniciones.


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